Situada dentro del recinto amurallado de La Tallada d’Empordà, ha sido recientemente restaurada apostando por conservar la esencia de los espacios y elementos más característicos de la casa, pero modernizándolos y siempre usando materiales naturales, tonos claros y una decoración sutil. En la planta baja se encuentra la cocina, unida con el comedor y uno de los salones. En esta planta destacan los suelos de pavimento continuo, los techos con la típica bóveda catalana y la puerta corredera que conecta la zona exterior. En la primera planta encontramos los 4 dormitorios, 2 bonitos baños con piezas antiguas y un  salón con mesa de juegos y/o trabajo, además de la zona de lectura, TV, etc. En toda la planta se conservan los suelos de baldosas hidráulicas, excepto en una gran sala ideada para practicar yoga, donde el suelo es de madera. Desde todas las estancias de la casa se disfrutan de vistas hacia al jardín, los balcones ajardinados de los vecinos o la iglesia del s. XII. Los espacios exteriores de la casa cuentan con zonas césped, una piscina de agua salada, un pérgola bajo la que compartir momentos y una espectacular bougainvillea que luce su máximo esplendor durante los meses de verano. Casa Sara es una suma de ambientes relajados, que invitan a bajar el ritmo, disfrutar de la tranquilidad que transmite el pueblo y dejarse llevar por el sonido de los pájaros y las campanas.